lunes, 28 de febrero de 2011

Cualquier otro Día


Erich Heckel
El día cristalino
Oil on canvas

Place Blanche


La serie Place Blanche, de Christer Strömholm, son fotos de travestis y transexuales de la Plaza Blanche de Paris, entre 1956 y 1962. Un intenso juego entre erotismo y documental. Hay más por acá.

El Tiempo que no Cura

Una de las grandes mentiras en las que cae el hombre, y con las que habitualmente nos engañamos, consiste en creerse aquella máxima que proclama que “El tiempo lo cura todo”. Durante varios años lo he comprobado, y ahora sé con certeza que no es verdad. Yo ya lo sabía, tras la muerte de tres de mis abuelos. Es raro el día en que no pienso en alguno de ellos. El tiempo no te cura de las pérdidas; lo único que hace es ayudarte a convivir con ello. Cuantos más años pasan, más echo de menos a las personas que perdí. Me explico: imagina que tienes que separarte durante meses o años de tu novia, de tu madre o de tu hermano. Te vas a vivir a otro país, por ejemplo, y prometes regresar algún día. Al principio te acostumbras a la distancia y a la ausencia. Pero la cuestión es: ¿cuánto resistirás sin verlos, a la novia, a la madre, al hermano, incluso al amigo? ¿Hasta qué punto el hombre aguanta y desde cuándo empieza a sentir que, en efecto, no puede tolerar no ver a dicha persona? ¿Cuánto tarda en comprarse un billete de vuelta, aunque ese viaje no esté planeado? O, al revés, ¿cuánto puede soportarlo quien se quedó en casa y vio a los suyos partir al extranjero? Cuantos más años transcurren, más distancia ponemos entre una y otra persona, y por ello el tiempo no lo cura todo, no alivia la herida, sino que la agrava porque la ausencia mata despacio. Aunque, al menos, nos enseña a convivir con esa herida. Y uno, por supuesto, se convierte en alguien más fuerte.

Thinking About You - Radiohead


domingo, 27 de febrero de 2011

To Die For y su trailer noventoso

Me encontré con esta peli que la había olvidado completamente. Nicole Kidman está espectacular. El trailer es horrendo y es exactamente el camino que tomaron, en Hollywood, hacia hoy: una dramatización efectista y pedorra de  todo lo que sucede en la película. Terrible...

Mata la voz noventosa, que nosotros no escuchábamos salvo en los VHS que algún tío traía de Nueva York, diciendo "bienvenido a la verdadera América, donde los criminales se vuelven celebridades y las celebridades esconden crímenes". Puaj!

Menos mal que nací en los '80.

Fidelio

My Own Private Idaho, de Gus Van Sant



El que la subió cortó antes de lo que debía, pero la secuencia inicial -hasta el orgasmo omitido, segundos después- es perfecto. Gran peli.

'My Own Private Idaho', de Gus Van Sant.

sábado, 26 de febrero de 2011

Don Rivera da la cara

A propósito de los Coen


Vi en una sala de cine 'Temple de Acero' y no me quejo. La película es tan liviana como una de Disney de principio de los '60, pero se disfruta como pocas películas major de hoy en día. Un blog amigo publicó esta crítica, de Diego Trerotola para El Amante, que aporta mucho y de un modo hasta poético, sobre estos hermanos-directores. 

Nada. Y de eso trata el cine de los Coen. En un primer intento de hurgar en su archivo visual, de esa nada se podrían extraer varias imágenes ejemplares: la hoja en blanco de Barton Fink o las nieves eternas que borran el paisaje de Fargo. Son válidas hasta cierto punto, porque además de decepcionar por su obviedad, son sólo excepciones de un cine más bien recargado de situaciones, personajes, estéticas. Porque los Coen ya arrastran con una serie de películas que ofrecen bastante, y multiplican demasiado, para sostener tan fácilmente que su recurrencia es la nada: hay comedia lunática, film noir recargado, dramas absurdistas [sic], películas de época, adaptaciones literarias, etc. Pero igual, antes de seguir, conviene diferenciar la nada del vacío, como dos cosas bien distintas. El de los Coen es un cine más bien empachado, al límite de su capacidad, colmado, muy lejano a cualquier vacío; nunca una película de la dupla se exhibe raquítica, despojada.

Me llama la atención cierta relación con algunas ideas -muy disparatadas algunas- que escribí hace un tiempo, en otro blog, a propósito de 'Quémese Después de Leerse':

Hay una nueva frialdad en los Coen. Ya en 'Sin Lugar para los Débiles' se palpitaba que, pese a lo vernáculo y humano de la historia, a los Coen no les interesaba específicamente lo narrado: ni el psicópata, ni Moss, ni el Sheriff. El personaje se va y no importa a dónde. Parten de ahí buscando mostrar un lugar donde no hay alternativas: quizá en el pasado o en los sueño, pero no allí. Lo narrado es el lugar, ese espacio sin oportunidades, seco [o nulo]. Por esto, estaban interesados en la forma fílmica y en los recursos cinematográficos y de puesta en escena que les permitieran acceder a ese terreno de la humanidad, quizá a una era. Ese era su propio desafío. Un poco frío, pero genial. Y por eso esa sensación de derrota después de ver 'Sin Lugar Para los Débiles'.

Ahora pienso que quizá, lo que yo llamaba "nueva frialdad" no tenía mucho de "nueva" (tendría que revisarlos). Homero Alsina Thevenet escribió (yo lo leí en 'Más Notas Sobre Cine') sobre 'Simplemente Sangre' y plantea algo que resulta también coherente con esta línea de pensarlos:

Pero una vez admitido que la propuesta temática es menor [o nula], no parece en cambio una exageración señalar que ha sido notablemente pensada y realizada. Los Coen han urdido una trama muy ingeniosa (...) A Hitchcock le habría gustado. Lo asombroso es que todo ello aparezca narrado con tan escasos diálogos, con tanta fuerza y concisión, con tanta habilidad de fotografía y montaje.

Habla un poco de lo mismo. Y si me sigue pareciendo que 'Quémese Después de Leerse' es la versión despreocupada del mismo nihilismo ostentoso de 'Sin Lugar para los Débiles'. Ahora me parece que 'Un Hombre Serio' puede ser una de las mejores películas que salieran de Hollywood en los últimos diez años. O no, y es sólo otro retrato de Nada.

viernes, 25 de febrero de 2011

Fidelio

Dani Umpi sobre Cisne Negro

Me encantó esta, de Dani Umpi, en su comentario sobre Cisne Negro:
Hubiera sido genial que las alucinaciones fueran reales, que esa fuera la trama. Bailarina loca envidia y desea a su compañera de compañía. A medida que le salen plumas y se arranca la piel con las uñas, se las agarra con su madre sobreprotectora y se hace la mosquita muerta con su profesor-director-no sé qué. Maltrata a la madre. Se garcha a la compañera y en el intervalo del estreno, rompe un espejo y mata a la morocha tatuada. Termina la función y la película con Natalie transformándose en un cisne para deleite del público. Eso está bueno. ¿No?

Charlie by the Portal (y otras), de Pete Eckert

Un fotógrafo llamado Pete Eckert que es ciego y saca fotos a partir de la escucha. Está este video, que es revelador, pero por momentos demasiado malo y publicitario. Allí se puede ver que el tipo es un crá, pero me llamó mucho más la atención desde sus fotos:

Hollywood

Cathedral

Charlie by the Portal

Saloon

Hay más en la página de él, pero estas son las que más me impresionaron.

Drag Me to Hell

miércoles, 23 de febrero de 2011

Esto está pasando ahora!

Esto salió en La Diaria hoy. Quedo por un rato perplejo...
Primero fue la psicóloga y escritora argentina Alicia Castilla, de casi 70 años, líder de opinión del movimiento internacional por la liberación del faso. Más de un lector y más de una lectora de la diaria se sorprenderán por saber que la autora de dos best-sellers de la comunidad fumeta como Cultura cannabis y Cultivo cannabis vive en Salinas. Mejor dicho, vivía ahí hasta que la Justicia dictaminó su mudanza forzosa a la capital departamental canaria por tener 15 plantines. Si no la conocías, googleá el nombre. Vale la pena.
Después fue Mauricio B, de 39 años, artesano y padre de dos hijos chicos. Cuando la Policía llegó a su casa en Pinamar el martes a las 9.00 ya había empezado a armar las pantallas de lámpara que vende a distintos comercios. Ni siquiera intentó ocultar sus plantas: señaló dónde estaban y explicó que las plantaba para fumarlas. La jueza de Atlántida lo procesó el miércoles y lo mandó a la cárcel de Canelones sin verlo siquiera, según informaron a la diaria allegados suyos. Tampoco tuvo asistencia legal.
Acá el artículo completo.

Esto está pasando ahora! Están metiendo gente presa! NO LO PUEDO CREER. Díganme cómo, dónde...!! Qué vidrios rompo, la puta madre que los parió!

Vena


Katy Stone
Vein, 2002
Acrylic on Mylar and tracing paper
7.5 x 9.5 inches

Gérard DuBois (1968-)

Algunas de sus pinturas me recuerdan, de la mejor manera, a Frida Kahlo y Diego Rivera. Es alucinante como conjuga lo real y lo fantástico. Hay muchas más en el sitio oficial.

Fidelio

martes, 22 de febrero de 2011

El Otro

Bertand Russell, un filósofo inglés al que le preguntaron en 1954 qué le diría a las generaciones futuras, de 1000 años en el futuro. Una de las cosas que contesta me impacta por su fuerte importancia hoy: "tenemos que aprender a vivir juntos, no a morir juntos". Lo dice bien clarito, en un época donde cada vez nos acercamos más y estamos más conectados, el verdadero desafío está en aprender a vivir con el diferente, el Otro.

domingo, 20 de febrero de 2011

El cine según Joris Ivens



El documental

El documental es la expresión de la realidad en su aspecto causal e inevitable. Constato sobre todo que el documental es el único medio que le queda al cineasta de vanguardia para luchar contra la Gran Industria. El cine de vanguardia es un cine que tiende a provocar el interés y la reacción del espectador. Y llamo cine de vanguardia al cine que toma la iniciativa del progreso y la mantiene. Que es mensajero de la sinceridad cinematográfica. El documental es el medio positivo dejado al cineasta de vanguardia para trabajar y expresar lo mejor de sí mismo en cuanto portavoz de la expresión de la masa, de la expresión popular en su obra.

El documental no es solo documentación, es diálogo con el público.

El documental no es solo una serie de filmaciones «de la realidad». Es la realidad organizada en forma artística y dramática, con la finalidad de decir la verdad.

Alguien nos ha definido como los cronistas modernos: esta definición no es totalmente exacta, porque no se trata solamente de describir los hechos, sino de criticarlos, de juzgarlos.

La verdad

¿Cuál debe ser la expresión artística de la verdad? ¿La verdad de la vida de frente a nuestras cámaras o en cambio la verdad como expresión de nosotros mismos?

Con las actuales posiblidades de una observación rápida y de una gran agilidad en los movimientos, se corre el riesgo de quedarse solamente en la superficie de la verdad: rozar la realidad en lugar de penetrarla o limitarse a mostrarla sin auténtica fuerza, sin audacia ni potencia creativa. Otro peligro es el de limitarse a una concepción estática de la verdad y no darse cuenta que cuando se siguen en modo activo los hechos y los personajes, los aspectos de la verdad cambian. Y es en la edición que se corren otros riesgos, porque allí se vuelve fácil mentir, consciente o inconscientemente.

La batalla

A veces, para mí trabajar en un documental es como una batalla. Y el enemigo (¿o queremos llamarlo la presa?) es imprevisible, no se sabe nunca lo que hace y cuándo lo hace. Yo estoy a su disposición, lo espero en la trampa, siempre listo a aceptar sus regalos, a estar disponible si me quiere.

En otros términos, después de largos períodos de observación, un director tiene su línea general en la mente. Pero debe estar preparado a coger de sorpresa todo lo nuevo que puede suceder. Si el acontecimiento no tiene interés se le eliminará en la edición. La cámara debe estar siempre en acción.

Vídeo

Hay que descubrir las posibilidades de los nuevos medios técnicos, especialmente el vídeo, instrumento para intervenir rápidamente, instantáneamente, en el mismo momento en el cual se está desarrollando una situación crítica. Un instrumento de comunicación y de agitación directa, en el puesto: es al cine como las armas ligeras a las artillerías pesadas. La experiencia vietnamita me ha enseñado a no contar nunca antes de haber entendido.

Participación

Hay que estar ligados estrechamente con los hombres que luchan por la libertad, por la independencia y sentir realmente con ellos todas sus penas, toda su fuerza, todas sus aspiraciones y toda su alegría; tratar de estar unido a todo esto, de descubrir los elementos que para estos hombres son normales y ordinarios y valorizarlos en su significado político extraordinario, que está en la dirección del futuro.

Se trata de participar activamente en los acontecimientos. Hacer revivir los hechos y las luchas del hombre moderno. Esto implica la responsabilidad social de nuestro arte. No somos solamente artistas o especialistas, sino hombres conscientes que toman parte en el desarrollo histórico de su propio país y de su propio pueblo.

Forma y contenido

Nunca razonamos (obviamente) así: de una parte está el contenido político, y en la otra parte, la forma. Son cosas que se encuentran íntimamente coaligadas entre sí de manera dialéctica.

Sigue aquí.

-Del libro: Cine en vivo: 70 directores hablan de cine, de Diego Tapia Figueroa

En cambio 'Lluvia', de Joris Ivens

Joris Ivens es como el Flaherty de Holanda. Estos dos documentales ('The Bridge', 1928 y 'Lluvia'), se nota que toman mucho de Einsestein, Vertov y Pudovkin, aunque con un poco más de magia, fantasía y terror... Se concentran muchísimo en pequeñas cosas (gotitas de agua, tuercas que encajan) y las reorganiza con encuadre y montaje (nada más!) y de ese modo las relata. En el caso de Lluvia el resultado es de una belleza que pocas veces vi en mi vida.


Y si antes descubría a Bert Haanstra (otro holandés) y su descabellada 'Glass', ahora termina de decantar como el rey de los chantas, con este corto (que no me extrañaría que haya sido multipremiado) donde toma uno de los encuadres de Ivens en 'Lluvia' y lo explota al máximo. Se llama 'El Espejo de Holanda', que si bien tiene su fuerza (el final, cuando un barco se esfuma como una vela es bellísimo), después de ver 'Lluvia' me da un poquito de ganas de escupirle la cara.


Glass, de Bert Haanstra (1958)

Hay algo que me fascina al comienzo de este corto pero que, de manera impensable, termina pareciéndose a una publicidad.

Al principio muestra lo maravilloso y mágico de un proceso artesanal de hacer vidrio (la jarra y su asa es una locura!); y después muestra la máquina (con un acompañamiento musical medio explícito, pero todo muy lustroso y coherente) como algo completamente deshumanizado y robótico (la música me hizo acordar al Revolution Number 9 del White Album). El jazz y el ritmo de la improvisación construyen una danza de las manos del artesano y hasta juega con la comedia con la gran jarra... Que está bien, porque esos hombres se pueden ver como héroes, como Charlie Parker o Miles Davis.


Pero al final, esos hombres terminan ¡tocando música' con esas máquinas, de manera canchera y despreocupada, hasta graciosa (lo del cigarro me parece atroz!). Una alianza ideológica muy prepotente y berreta. Todo lo maravilloso que fue esa danza de manos le chupa un huevo, las hace desaparecer y aparecer a piachere para que el mismo jazz del comienzo (que había sido claramente asociado a las manos artesanales, no a la máquina) se unan para hacer un desparpajo de fuegos artificiales y glorificación capitalista (el plano de todas las botellas, como satisfecho diciendo: 'miren todas las botellas que produjimos')...

Y aparte esos tipos, los artesanos del vidrio, NO EXISTEN MÁS! Esas máquinas que terminan canchereando un jazz con los 'trompetistas' del vidrio, los mataron e hicieron desaparecer. Todos ellos se murieron y no hay nadie que se acuerde de ellos y este documental los usa para... ARGH!

Y lo nominaron al Oscar a Mejor Corto 1958.

sábado, 19 de febrero de 2011

Apolo 18

Una especie de 'Actividad Paranormal' pero en la luna. Al principio me pareció una atrocidad, sobre todo por el cartel de "Este material no fue alterado..." que, se sabe, la gente se lo cree. Después, al final, parece una comedia.

Lo que es más sorprendente es que, estoy seguro, hay gente que lo cree de pé a pá. Hay como una necesidad de creer a través de la imagen.




Tengo entendido que hay gente que cree, realmente cree, que la llegada a la luna la filmó Kubrick. Hay un documental que lo plantea, creo... Esto es como la prostitución magnánima de ese "chisme".

Hubiese estado bueno, si el mundo fuese otro, que alguien filmara bien la persecusión de los humanos poseídos en trajes espaciales por la luna... 

'Mala Noche', de Gus Van Sant


'Mala Noche' es el primer largo de Gus Van Sant. Filmada en un blanco y negro guerrillero, cuenta la historia de un clerk de Portland, Oregon, que está enamorado de un mexicano que vive en la calle y siempre anda en la vuelta con sus amigos. En sus constantes intentos -algo desesperados- por cojérselo, el norteamericano se acerca a la realidad del joven mexicano, cuyo nombre es Johnny.


Pero no se trata de una revindicación moral, nada por el estilo. Hay una separación drástica entre ellos. El yanckie quiere al mexicano, por eso lo ayuda, lo lleva a su casa y le da de comer. Porque quiere cojérselo y va a hacer todo lo posible por lograrlo: ofrecerle plata, trepar unas escaleras de incendio, llevarlo al campo y perseguirlo en la calle. Pero no lo logra porque hay algo que no es franqueable. Y al alejarnos de Johnny en la lluvia, ahora solo y sin un mango, es inevitable la amarga sensación de que, como espectadores de este breve retrato, lo verdaderamente esencial del asunto estuvo todo el tiempo escapándosenos, al norteamericano enamorado y a nosotros también.


ROOM

martes, 15 de febrero de 2011

UN TEXTO


Ponerme a escribir esto no me es nada fácil. Siempre que escribo persigo un ritmo que me lleva a corregir constantemente, borrar, releer. No quiero hacer eso con este post, particularmente con este. El blog ya tiene más de 3 meses y mucho de lo que en un comienzo me significó una fuerte liberación, casi una transgresión, ahora perdió mucho de sentido como post. Desconozco la causa. Me siguen gustando los cuerpos de hombres y mujeres; sigo navegando por internet (cada vez más y mejor) y encontrando cosas lo suficientemente interesantes para postearlas; pero la forma... algo se afirmó acá y ya quedó definido... Y desde hace pocos días que lo siento muerto.

Postear imágenes. Podría postear imágenes eternamente, varias imágenes por día. Pero la realidad es que ya ni tengo tanto interés en las imágenes que recibo en mi carpeta de 'Imágenes' del Reader. Son demasiadas imágenes. Y si la gracia estaba, en un principio, en postear las que me significaban de algún modo (dentro del inmenso mundo del internet), al desarrollar un recorrido más ajustado a mi propio interés pasé a recibir más de 120 imágenes que me interesan por día, y eso ya es de nuevo lo mismo que nada.

Algo cambió a partir del post 'The Last Picture Show' (paradójico). Cualquiera que viniera siguiendo el blog lo notaría. Había un ritmo, una cachondez y una forma de manifestar preocupaciones que, al menos para mí, sostenían una coherencia. Esa coherencia se perdió y eso se nota en todos los posts de este mes de Febrero. Los últimos cinco posts son tan indiferentes entre sí que para mí representan una pérdida de rumbo. Y no es que siempre quiera tener las coordenadas, pero sé que algo está mal.

Algo similar me había pasado casi al comienzo, cuando empecé a postear frenéticamente imágenes de poquísimo sentido. Me acuerdo. Estaba fascinado con buscar imágenes lejanas, viajar con ellas a los barrios bajos de EE.UU o a algún pueblo recóndito de Asia, y si bien con algunas podía pasar, con otras no pasaba nada. Me hice una propia advertencia con este post (Ojo con la Paja) y al siguiente ya hacía un balance para intentar seguir adelante y no dejar ese juego pelotudo de postear cualquier mierda.

Llamémosle madurar o lo que sea, pero yo siento que hasta acá llegó la primer etapa en la vida de este blog.