Primero fue la psicóloga y escritora argentina Alicia Castilla, de casi 70 años, líder de opinión del movimiento internacional por la liberación del faso. Más de un lector y más de una lectora de la diaria se sorprenderán por saber que la autora de dos best-sellers de la comunidad fumeta como Cultura cannabis y Cultivo cannabis vive en Salinas. Mejor dicho, vivía ahí hasta que la Justicia dictaminó su mudanza forzosa a la capital departamental canaria por tener 15 plantines. Si no la conocías, googleá el nombre. Vale la pena.
Después fue Mauricio B, de 39 años, artesano y padre de dos hijos chicos. Cuando la Policía llegó a su casa en Pinamar el martes a las 9.00 ya había empezado a armar las pantallas de lámpara que vende a distintos comercios. Ni siquiera intentó ocultar sus plantas: señaló dónde estaban y explicó que las plantaba para fumarlas. La jueza de Atlántida lo procesó el miércoles y lo mandó a la cárcel de Canelones sin verlo siquiera, según informaron a la diaria allegados suyos. Tampoco tuvo asistencia legal.
Acá el artículo completo.
Esto está pasando ahora! Están metiendo gente presa! NO LO PUEDO CREER. Díganme cómo, dónde...!! Qué vidrios rompo, la puta madre que los parió!
No hay comentarios:
Publicar un comentario