Londres, enero de 1874

La siguiente carta se la escribió Vincent Van Gogh a su hermano Theo desde Londres, donde Vincent trabajaba para la galería de arte Goupil. Esta carta de su juventud (Vincent nació en 1853) hace añicos a la imagen de loco que todos tenemos de él, y lo muestra como un pibe muy lúcido y, sobre todo, feroz devorador de arte. 

Veo que te interesas por el arte y esto es una buena cosa, viejo. Me alegra que te guste Millet, Jacque, Schreyer, Lambinet, Frans Hals, etc.; porque como dice Mauve, «es algo».

Sí, el cuadro de Millet, el Angelus del Anochecer, «es algo», es magnífico, es poesía. Con cuánto gusto hablaría todavía de arte contigo, pero no tenemos más que escribirnos con frecuencia; encuentra bello todo lo que puedas; la mayoría no encuentra nada suficientemente bello. 

Escribo aquí abajo algunos nombres de pintores que me gustan particularmente: Scheffer, Delaroche, Hébert, Hamon, Leys, Tissot, Lagey, Boughton, Millais (2), Thijs Maris, De Groux, De Braekeleer (2), Millet Jr., Jules Breton, Feyen-Perrin, Eugène Feyen, Brion, Jundt, George Saal, Israels, Anker, Knaus, Vautier, Jourdan, Compte-Calix, Rochussen, Meissonnier, Madrazo, Ziem, Boudin, Gérome, Fromentin, Decamp, Bonington, Díaz, Th. Rousseau, Troyon, Dupré, Corot, Paul Huet, Jacque, Otto Weber, Daubigny (2), Bernier, Emile Breton, Chenu, César de Cock, señorita Collart, Bodmer, Koekkoek, Schelhout, Weissenbruch, y last not least Maris y Mauve. Pero continuaría así no sé cuánto tiempo, y faltan los viejos, y estoy seguro todavía de haber omitido algunos entre los mejores. 

Vincent

Theo y Vincent Van Gogh