lunes, 1 de agosto de 2011

Suspendus



Me encantaría postear un simple "Este blog permanecerá estático por un tiempo" pero no puedo. El blog fue y es el único modo que conocí hasta ahora para poder convivir sanamente con el Internet y con la vida y, de algún modo, este blog me salvó. Suspenderlo sin decir que fue importante para mí sería como escribir una carta de despedida a un amor sin decir "te quiero".

Pulps no cierra y ojalá no cierre nunca. Si algún día algo me lleva a hacerlo desaparecer sépase que me voy a haber convertido en una persona que no quiero ser: alguien que niega este proceso, el cual -entre pulsaciones de todo tipo, fraudulencias varias y arranques inocentes pero honestos, etc.- me define o, al menos, me constituye.

No reniego de nada de lo que hay acá, ni un solo post. Hoy desearía haber descubierto la verdadera independencia de todo esto mucho antes, y que no me cegara nunca en intentos por sorprender, impresionar o estar a la altura de mis "mejores posts". Como cualquiera, hubiese querido ser "más libre"... Pero lo fui en cuanto pude y ese intento quedó plasmado acá, para bien y para mal. Ese es el valor de todo esto: que no importa cuán afanosamente intentemos controlar lo que transmite nuestro blog, eso siempre se nos escapa y lo que se evidencia y perdura es lo que nosotros no sabemos de nosotros mismos.

Así que ta. Eso. Este blog permanecerá suspendido por tiempo indeterminado... Pero volverá.